1ª Premio en el Primer Concurso de Poesía y Cuento "Entre Letras y Río". Diamante 2012.
Oigo
un lamento debajo de la puerta,
el
habitual verdugo de cada día
se
arroja al suelo anhelando un sollozo:
las
crónicas no son más que sábanas
manchadas
de dinero,
arduo
pasaje a la riqueza
de
los que caminan en el piso de arriba.
Tiene
la tarde un harto sabor a melancolía;
perfume
barato de flores concedidas...
tienen
mis hombros un cansancio absoluto:
fracaso
de mil intentos de elevar mi cuerpo
de
esta nociva cama que desafina mi espalda.
Mientras
afuera se despierta le guerra,
en
la nueva conquista hacia la misma banca,
hay
un paréntesis donde muchos callan
y,
otros, gimen la noche de hambre:
las
luciérnagas opacan su luz
y
sólo queda un rincón para los grandes poetas.
Pamela
Penau.